Tomates: Cáncer de próstata
En el año 1995 un equipo de investigadores americanos, como resultado de un amplio estudio realizado sobre 47.000 varones profesionales relacionados con la Sanidad, señaló que la ingesta frecuente de tomates se asociaba a un descenso en el risgo de sufrir cáncer de próstata. Ahora, en el Journal of the National Cancer Institute, se confirman aquellos datos con el seguimiento de los 6 años posteriores, evaluando el descenso de riesgo en un 16%. Los efectos protectores se le asignan al componente licopeno.