Existen las lentes fotocrómicas cuyos cristales se oscurecen o aclaran según sea la luz recibida, pero los usuarios no pueden ajustar su grado de oscurecimiento. Ahora se acaba de presentar un prototipo ideado por científicos de la Universidad de Washington que no solamente permite ello sino que los cristales, a voluntad, pueden cambiar su tono amarillo, verde, púrpura, manipulando un pequeño botón incorporado. El nuevo material utilizado usa óxidos de tipo orgánico más que inorgánico en forma de gel que se coloca entre dos capas de material electrocrómico.