Cinta aislante
Un modesto rollo de cinta adhesiva tuvo un gran protagonismo en el programa Apollo de la NASA, tras el alunizaje de los astronautas Gene Cernan y Jack Schmitt, el 11 de diciembre de 1972. Un martillo ubicado en un bolsillo del traje lunar de Cernan cayó sobre el guardabarros posterior del coche lunar de exploración y lo desgarró. Era una protección imprescindible para resguardar del polvo lunar. Cernan recordó el rollo de cinta aislante gris situado bajo su asiento. Y con la ayuda de esa sencilla tecnología pudo salvar la misión pues el guardabarros aguantó más de cuatro horas hasta volverse a caer. Al día siguiente con unos cartones y el rollo de cinta fabricaron otro guardabarros de repuesto.