A las policías japonesas y coreanas les preocupa los posibles actos vandálicos que puedan ocasionar los hinchas que acudan al próximo Mundial. Uno de los encuentros de más riesgos será el Argentina-Inglaterra del 7 de junio. Por ello. En Sapporo, al Norte de Japón, están probando una nueva estrategia que mejora otras iniciativas ya probadas en Estados Unidos e Irlanda del Norte. Se trata de un fusil que dispara una cápsula que explosiona tras unos metros de recorrido, desplegándose una red de 5 metros cuadrados de superficie,que, a una velocidad de 30 metros por segundo, cae sobre el grupo alborotador, inmovilizándolo.